Parashat Tetzaveh

Esta parashah comprende la parte del libro de Shemot que va desde el 27:20 al 30:10. Hace parte de la segunda sección en que hemos dividido el libro de Shemot. La primera parte hablaba de la Redención y la segunda parte, como finalidad de la Redención, habla del Servicio al Eterno a partir de la Revelación del Sinaí en donde nos encontramos ahora. 

Vimos que esta segunda sección de Shemot la podíamos dividir en la entrega de la Torah (capítulos 19-20), los mishpatim o juicios (capítulos 21-24), La Terumah para el Tabernáculo y todos los utensilios de él, (capítulos 25-27), el sacerdocio (la presente parashat Tetzaveh, capítulos 28 y 29) y el servicio de adoración (capítulos 30 y 31). 

Así que la parte central de esta parashah es la institución del sacerdocio levítico, de lo cual tendríamos mucho que hablar ya que como netzaritas tenemos que hallar la relación entre el sacerdocio levítico y el sacerdocio conforme al orden de Malkitzedeq del cual Ieshúa es sumo sacerdote.

Por ejemplo, el nombre de Mosheh no figura ni una sola vez en esta Parashah; es esta la única vez en la cual no aparece el nombre de Mosheh desde su nacimiento. Si este hecho no fuere casual, podría indicar que Mosheh da toda la prioridad a su hermano Aharón que va a ser el primer כהן «kohén» -sacerdote- secundado por sus hijos; quiere decir, en otras palabras, que la función sacerdotal es estrictamente distinta de la autoridad suprema, o sea Mosheh, cuyos límites son determinados por la Revelación, quiere decir la profecía. A partir de este momento la función recaerá sobre  ,Aharón גדל כהן «Kohén Gadol» -Sumo Sacerdote-, mientras que la autoridad legislativa estará representada por Mosheh, llamado por la Torah מחוקק «mejoqeq» -legislador (Véase el comentario de Rashí en Deuteronomio 33:21). Por eso, a Mosheh le incumbe la función de investir al Kohén Gadol en sus funciones. 

Más tarde en la historia de Israel, esta atribución corresponderá al presidente del Sanhedrín

Todo esto viene a indicar que el כתר תורה «Kéter Torah» -la corona de la Torah- atribuida aquí a Mosheh, es superior al כתר עבודה «Kéter Avodah» -la corona del culto-. Además, la corona de la Torah es accesible a todo judío, sin diferencia de origen, mientras que la corona del sacerdocio está limitada a Aharón Hakohén y se transmite por herencia solamente a sus descendientes.

En cambio, el sacerdocio de Ieshúa admite la posibilidad de tener también la realeza, y nosotros netzaritas podemos tener las dos coronas. De modo que de los sacerdocios tendríamos mucho de qué hablar.

Pero como nos hemos propuesto en este ciclo de parashot ir estudiando las mitzvot del Eterno para guardar su Torah, en vez de estudios agádicos o exegéticos, examinemos las mitzvot de la presente parashah. Previo a las instrucciones sobre el sacerdocio, la parashah presente determina ciertas mitzvot que, en este caso, solo rigen para los levitas, mientras exista el Tabernáculo o el Templo. Ellas son:

  1. Precepto de encender el candelabro en el santuario, Éxodo 27:21. 
  2. Precepto para los kohanim de ponerse sus vestiduras (para hacer su servicio en el templo), Éxodo 28:4.
  3. Precepto para los kohanim de que el pectoral no se desprenda del efod, Éxodo 28:28.
  4. Prohibición de desgarrar la casaca (meil) de los kohanim, Éxodo 28:32.
  5. Precepto de comer la carne de la ofrenda de pecado (jatat) y de la ofrenda de culpa (asham), Éxodo 29:33.
  6. Precepto de quemar sahumerio, Éxodo 30:7.
  7. Prohibición de quemar y ofrendar algo en el altar de oro, Éxodo 30:9.

Examinemos la primera que se encuentra en Shemot 27:20-21:

 וְאַתָּ֞ה תְּצַוֶּ֣ה ׀ אֶת־ בְּנֵ֣י יִשְׂרָאֵ֗ל וְיִקְח֨וּ אֵלֶ֜יךָ שֶׁ֣מֶן זַ֥יִת זָ֛ךְ כָּתִ֖ית לַמָּא֑וֹר לְהַעֲלֹ֥ת נֵ֖ר תָּמִֽיד׃ בְּאֹ֣הֶל מוֹעֵד֩ מִח֨וּץ לַפָּרֹ֜כֶת אֲשֶׁ֣ר עַל־ הָעֵדֻ֗ת יַעֲרֹךְ֩ אֹת֨וֹ אַהֲרֹ֧ן וּבָנָ֛יו מֵעֶ֥רֶב עַד־ בֹּ֖קֶר לִפְנֵ֣י יְהוָ֑ה חֻקַּ֤ת עוֹלָם֙ לְדֹ֣רֹתָ֔ם מֵאֵ֖ת בְּנֵ֥י יִשְׂרָאֵֽל׃ 

Veatah tetzaveh et bené Israel veiqjú eleja shemen záit zaj katit lamaor, lahaalot ner tamid. Beóhel moed mijutz laparójet asher al haedut, iaaroj otó Aharón uvanav meérev ad bóqer lifné IHWH, juqat olam ledorotam meet bené Israel.

Y mandarás a los hijos de Israel que te traigan aceite puro de olivas machacadas, para el alumbrado, para hacer arder continuamente las lámparas. 21 En el tabernáculo de reunión, afuera del velo que está delante del testimonio, las pondrá en orden Aarón y sus hijos para que ardan desde la tarde hasta la mañana delante de IHWH, como estatuto perpetuo por sus generaciones en nombre de los hijos de Israel.

(Shemot 27:20-21)

TU HABRÁS DE ORDENAR A LOS HIJOS DE ISRAEL

Rambán establece la diferencia entre el lenguaje usado en la Parashah anterior, donde se ordenó la construcción del Mishkán, y el lenguaje utilizado en Parashat Tetzaveh, donde se hablará del encendido de la menorah y de la designación de los kohanim y la confección de sus ropajes. Mientras que en la Parashat Terumah se emplea el verbo ועשית «vehasita» -y habrás de hacer-, en nuestra Parashah se emplea el verbo ואתה תצוה «Veatah tetsaveh» -y habrás de ordenar-, lo que para Rambán quiere decir: Que será el mismo Mosheh directamente, el que deberá ordenar a los hijos de Israel, de ahí la palabra ואתה «veatah» -y tú-.

Sin embargo, lo que llama la atención es que, en cuanto al encendido de la menorah, la Torah dedica un pasaje en Levítico 24 del 1 al 4[1], es por eso que Rashí comenta en Levítico 24:1, que lo que la Torah hace en Exodo 27, no es enunciar el precepto del encendido de la menorah, sino que en el orden general de la construcción del Mishkán, recalca la necesidad de que haya una menorah encendida. Por lo tanto «tú habrás de ordenar» quiere decir, lo harás ulteriormente. 

Sin embargo, en el orden establecido por los rabinos, la mitzvah la colocan aquí, lo que quiere decir que existen varias escuelas sobre el número y el orden de las mitzvot

Para Ibn Hezra el inicio de esta Parashah sigue un orden lógico, ya que en la Parashah anterior quedó completada la relación de los elementos sacros que contenía el Mishkán, mientras que en la Parashat Tetzaveh se hablará de las personas que estarán al servicio del Mishkán y de sus funciones exclusivas, y una de esas funciones era el encendido de la menorah. La Parashah recalcará que las personas que estarán al servicio del Mishkán serán distinguibles por su linaje, familia y ropajes; y la parashah seguirá enunciando las funciones de los kohanim, que serán enseñados e introducidos en su función por el mismo Mosheh. 

El Gaón Eliahu de Vilna agrega que, por lo general, y de acuerdo con el calendario hebreo, la Parashat Tetzaveh, donde no figura el nombre de Mosheh ni una sola vez, se lee en las sinagogas alrededor del siete de Adar, fecha de la desaparición de Mosheh Rabenu, de acuerdo con la Tradición Oral de Israel. 

QUE TE TRAIGAN

Volviendo al texto. Cuando el Eterno le indica a Mosheh que él debe pedir que le traigan, literalmente quiere decir que Mosheh deberá supervisar esto. Sin embargo, algunos comentaristas quieren deducir de ello que la luz de la menorah no era necesaria para la שכינה «Shejinah» -Presencia Divina- que había en el Santuario, sino, más bien, para iluminar a las personas que ingresaren al mismo. 

ACEITE PURO DE OLIVAS MACHACADAS

Nada mejor que la misma Mishnah en el tratado Menajot capítulo 8 mishnah 4 y 5 para explicar cuál era ese aceite puro procedente de olivas no prensadas ni molidas. Dice así:

4. Hay tres (artes de preparar) la aceituna y de cada una de ellas proceden tres tipos de aceite. El primer arte (de preparar) aceituna es el siguiente: se recoge la aceituna de la copa del olivo, se machaca y se mete en el cesto. R. Yehudá dice: alrededor del cesto es la primera clase. Luego se oprime con una viga. R Yehudá dice: con piedras. Es la segunda clase. Luego se vuelve a machacar y a oprimir. Es la tercera clase. La primera clase es para el candelabro y las otras para las oblaciones. El segundo arte (de preparar) las aceitunas es el siguiente: se recogen (las aceitunas) que se hallan al nivel del tejado[2], se machacan y se meten en el cesto. R. Yehudá dice: alrededor del cesto, (de allí sale) la primera clase. Luego se oprimen con una viga. R. Yehudá dice: con piedras. De ahí proviene el aceite de segunda clase. Se machacan y se estrujan de nuevo: de ahí proviene la tercera clase. La primera se usa para el candelabro, las restantes para las oblaciones. El tercer arte (de preparar las aceitunas) es el siguiente: se amontonan en casa hasta que maduran completamente, luego se suben y se dejan secar en el tejado, después se machacan y se meten en el cesto. R. Yehudá dice: (de las que están) alrededor del cesto (proviene el aceite) de primera clase. Luego se estrujan con la viga. R. Yehudá dice: con las piedras. De ahí proviene el aceite de segunda clase. De nuevo se machacan y se estrujan. De ahí resulta el aceite de tercera clase. El de primera se usa para el candelabro, los otros para la oblación.

5. La primera clase de aceite del primer arte (de preparar las aceitunas) es la mejor de todas. La segunda del primer arte y la primera del segundo son de igual categoría. La tercera del primer arte, la segunda del segundo y la primera del tercero son de igual categoría. La tercera del segundo y la segunda de] tercero son de igual categoría. La tercera del tercero es la peor de todas. También habría que inferir que la oblación debe ser hecha con aceite del puro, porque si el aceite del candelabro, que no se usaba para la comida, debía ser de aceite puro de oliva, ¿no habría que inferir que el aceite de las oblaciones, que se usaba para la comida, debería ser también puro de oliva? La Escritura dice: (aceite) puro, (de aceitunas) machacadas para la lámpara [Shemot 27:20], pero no puro machacado para las oblaciones.

A su vez la Gemará del tratado Menajot folio 86a añade:

GEMARÁ. Se preguntó: ¿permite leer la Mishná megargeró o megalgeló?[3]: ven y escucha, porque se enseñó: aceite de oliva[4], es decir, del árbol de olivo[5]. Por tanto, dijeron, el primer cultivo es cuando las aceitunas completamente maduras son tomadas de la parte superior del árbol; a una prensa de oliva-, las caídas a tierra a un molino y poner en cestas. El aceite que rezuma fuera es la primera clase [de aceite]. Luego se presionan con el haz, y el aceite que rezuma fuera es la segunda clase. Entonces son sacadas [de la prensa de oliva-] y las caídas en tierra y se presiona de nuevo; esto da la tercera clase. La primera clase es el adecuado para el candelabro y los otros para ofrendas de harina. El mismo [procedimiento se aplica] para la segunda cosecha de aceitunas. La tercera cosecha de aceitunas es cuando las aceitunas últimas del árbol se empaquetan en la cubeta hasta que se sobremaduren, a continuación, son subidas al techo y secadas de la misma manera como los dátiles, hasta que el jugo se haya escurrido. A continuación, son llevadas a la prensa de oliva-, las caídas a tierra a un molino y puestas en cestas; y el aceite que rezuma fuera es el primer tipo [de aceite]. Luego se presionan con el haz; y el aceite que rezuma fuera es la segunda clase. Entonces son sacados [de la prensa de oliva] y las caídas a tierra y se presiona de nuevo; esto da la tercera clase. La primera clase es adecuada para el candelabro y las otras para ofrendas de harina. R. Judá, dice. Las aceitunas no eran molidas sino golpeadas con un mortero; no eran presionadas con el haz sino con piedras; y no eran puestas en las cestas, pero alrededor de los lados de las canastas.      

¿No es [el texto mismo de nuestra Mishná] contradictorio? ¡La declaración de que son GOLPEADAS está de acuerdo con R. Judá mientras la instrucción PONER EN LA CANASTA está de acuerdo con los rabinos! — Esta Taná [de nuestra Mishná] coincide con R. Judá en una cosa y no está de acuerdo con él en otra.

La intelección de la Gemará no siempre es fácil pues fue escrito en arameo. Que un aceite sea puro es que no contenga sedimentos. Las siguientes notas en el comentario de Rashí creo que explican todo esto de una forma más clara para nosotros:

“El aceite para el Candelabro debía ser tan puro que nunca debía haber contenido sedimentos en ninguna etapa de su preparación. El olivo era cosechado tres veces al año. La primera cosecha era de las olivas en la punta del árbol que habían madurado primero gracias a que habían recibido con fuerza los rayos del sol; la segunda, la de las olivas en las ramas intermedias, que maduraban después; finalmente, la tercera cosecha era de las olivas inferiores, que maduraban tardíamente. Las olivas eran machacadas primero con un mortero; luego prensadas con un madero y finalmente molidas con piedras de molino. Únicamente el aceite de las olivas de estas tres cosechas que habían sido machacadas con mortero era apto para el Candelabro. Los demás aceites eran para las oblaciones de harina”.

Es muy interesante un drash que muestra que no se puede tener la unción del espíritu del Eterno (que externamente se da con aceite), mientras nuestras vidas no sean machacadas…

PARA HACER ARDER CONTINUAMENTE LAS LAMPARAS. 

Se encendía la flama del candelabro hasta que la flama se elevaba por sí misma[6]. No significa que la flama de la vela debía arder constantemente, puesto que durante el día el Candelabro no era encendido

Ahora en el texto se habla de תמיד «Tamid«. Pues bien, los rabinos divergen en cuanto al significado de la palabra. De acuerdo con Rashí, esto quiere decir que la menorah estaba encendida únicamente de noche y no permanentemente; mientras que otros comentaristas sostienen que el נר מערבי «Ner Maharabi«, que era la lámpara central, quedaba encendida a perpetuidad, y de ahí que hasta nuestros días en las sinagogas haya un nu נר תמיד «Ner Tamid» -luz perpetua- pendiendo sobre el ארון הקדש «Arón Haqodesh» –el Arca de la Torah-. En las sinagogas tradicionales, el נר תמיד  «Ner Tamid» sigue siendo alimentado por aceite, tal como era en el משכן «Mishkán» -Tabernáculo- y más tarde en el Bet Hamiqdash

En todo caso, el acto de encender las candelas cada noche es llamado «continuamente», en el mismo sentido que se dice: «Ofrenda de ascensión continua,»[7] cuando solamente era ofrecida una vez al día. Y, asimismo, con respecto a la oblación de jabitín del Kohén Gadol se dice que era «continua» aun cuando solamente era ofrecida la mitad en la mañana y la otra mitad en la tarde[8]. Y la expresión enunciada con respecto al Pan de Semblantes[9], significa que el pan era puesto en la Mesa de un Shabat al otro[10].

LAS PONDRÁ EN ORDEN AARÓN Y SUS HIJOS PARA QUE ARDAN DELANTE DE IHWH DESDE LA TARDE HASTA LA MAÑANA

Según Rashí, lo que el Eterno quería decirle a los sacerdotes era: Pongan en cada candela del Candelabro una medida suficiente de aceite para que permanezca encendida desde la noche de un día hasta la mañana siguiente. Los rabinos calcularon esa medida en un medio log de aceite por candela para las largas noches de invierno del mes de Tevet. Esta misma medida se aplicaba a las noches de los demás meses. Y si sobraba, no importaba[11] .

El talmud curiosamente nos describe la técnica con que calcularon el medio log:

TRES LOGS Y MEDIO PARA EL CANDELABRO, UNA MITAD- PARA CADA UNA DE LAS LUCES. ¿De dónde se deriva?:

Nuestros rabinos enseñaron: [está escrito.] Que se queme de la noche a la mañana: proporciona la medida necesaria para que pueda arder desde la noche a la mañana. Otra interpretación: ‘de la noche a la mañana’: no tienes ningún otro servicio que sea válido de noche a la mañana salvo este[12] por sí solo. Y los sabios han calculado que una mitad de log de aceite [se quema] de noche a la mañana. Algunos dicen que lo calcularon mediante la reducción de [la cantidad original de aceite][13]; mientras que otros dicen que calcularon mediante el aumento[14]. Quienes dicen que calcularon mediante el aumento de [la cantidad de aceite adoptaron el principio que] la Torah tiene consideración por el dinero de Israel[15]; y aquellos que dicen que ellos calcularon reduciéndolo [adoptaron el principio que] no hay pobreza en el lugar de la riqueza.

(Menajot 89a)

En las noches de invierno las noches son más largas y, por lo tanto, se precisaba de un medio log de aceite para asegurarse de que las candelas ardieran toda la noche. Si en las noches más cortas esta misma cantidad de aceite provocaba que las candelas ardieran incluso de día, ello no constituía un problema, por lo que no se reducía la cantidad de aceite. 

Como nos hemos dado cuenta, esta es la manera de trabajar halájicamente una mitzvah. Obviamente es el resultado de amar al Eterno y querer guardar su palabra en la consideración respetuosa de qué era lo que quería mandar. Pero los que necesitan una motivación, el enfoque halájico no va a dar esa motivación. Además, que es un mandamiento que solo obliga a los sacerdotes. Así que para los que no son sacerdotes se necesita también un enfoque midráshico del tema y para ello que mejor que textos de la Brit HaJadashah que desarrollan este tema a nivel de drash y sod.

2 Tim 1:6-7 Rav Shaul nos dice: 

Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Eloha que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos ha dado Eloha espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

Rav Shaul le está hablando a otros sacerdotes, a los sacerdotes conforme al orden de Malkitzedeq. Esos somos nosotros según se nos ha enseñado. Se nos habla de un fuego que tenemos que estar avivando. Es el fuego de los dones del Espíritu impartidos por nuestro Mashíaj que nos unge con los dones del Espíritu para que podamos ser luz a las naciones. Y como dijo nuestro Rebe: Fuego vine a meter en la tierra: ¿y qué quiero, si ya está encendido? (Hillel 12:49) o como nos dijo nuestro Rebe en el sermón del monte, no se enciende una luz y se pone debajo de una vasija, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. (Matitiahu 5:15)  

También Rav Shaul nos lo vuelve a repetir en 2 Corintios 4:6: Porque Eloha, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Eloha en la faz de Ieshúa HaMashíaj.

Es fácil no avivar la llama de don de Eloha, sino esperar pasivamente a que ilumine por sí misma. Tal apatía y temor deben superarse por medio del Espíritu Santo, que no produce timidez, sino los medios de conquistar, poder, amor y autodisciplina. Por ello Rav Shaul nos dice en otra parte, Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! (Rom 8:15). O como nos dice Iojanán en su primera carta 4:18, En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor. De ahí que Rav Shaul le decía a Timoteo que ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza. (1 Tim 4:12)

Se nos manda ser como los ángeles:

Que hace a sus ángeles vientos y a sus siervos llamas de fuego (Carta a los Judíos Mesiánicos (Hebreos) 1:7

Lo interesante es que en este texto se está comparando a Ieshúa como Hijo frente a los ángeles mostrando que es superior a ellos. La palabra griega pneumata, equivalente al hebreo rujot, se traduce como «espíritus» en v.14 de Hebreos, pero aquí se ha traducido «vientos» porque el sentido del Salmo 104:4 en hebreo generalmente se da como, «… que hace a los vientos sus mensajeros y a las llamas de fuego sus ministros.» Sin embargo, la gramática hebrea permite la posibilidad de revertir el sujeto y el predicado y el judaísmo lo tiene en cuenta. Una obra judía pseudoepigráfica del siglo primero afirma: «Oh Señor… ante quien los ejércitos (de los cielos) están temblando y a tu palabra cambian a viento y fuego…» (4 Ezra 8:20-21) El Ángel de Jueces 13 es descrito como quien le dijo a Manóaj, el padre de Shimshon, «Eloha nos cambia hora por hora;…

a veces él nos hace fuego y a veces viento». (Yalkut Shim’oni 2:11:3)

En Revelación 1:14; 2:18; se nos dice de Ieshúa:

Sus ojos como llama de fuego Ojos como una llama de fuego en contra de la falta de santidad. Esto es lo que nuestro Rebe es y nos enseña como nuestro modelo.

Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo. Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: Dabar Elohim , La Palabra del Eterno. Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso. (Revelación 19:15)

Esta característica de los ojos de nuestro Rebe cuando venga como Mashíaj ben David se asocia con que es llamado la Palabra de Eloha y que de su boca sale una espada aguda (Revelación 1:16; 2:12,16). 

La espada en estos versos y en el v.21 (Y los demás fueron muertos con la espada que salía de la boca del que montaba el caballo, y todas las aves se saciaron de las carnes de ellos) es la Palabra de Eloha (véase 1:2,16). 

Pero la asociación de los ojos de fuego, ser la Palabra del Eterno y que de su boca salga una espada, estas mismas tres metáforas aparecen en la Carta a los Judíos Mesiánicos como podemos ver en 4:12-13:

Porque la palabra de Eloha es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.

Ese es nuestro Rebe: Fuego, Palabra del Eterno, Espada. Que nuestros corazones se enciendan con la llama de la Palabra viviente del Eterno, el Mashíaj, para que tomemos la espada del espíritu y cortemos en nosotros todo lo que sea impureza y falta de santidad.

Shabat Shalom

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[1] Habló IHWH a Mosheh, diciendo: Manda a los hijos de Israel que te traigan para el alumbrado aceite puro de olivas machacadas, para hacer arder las lámparas continuamente. Fuera del velo del testimonio, en el tabernáculo de reunión, las dispondrá Aarón desde la tarde hasta la mañana delante de IHWH; es estatuto perpetuo por vuestras generaciones. Sobre el candelero limpio pondrá siempre en orden las lámparas delante de IHWH.

[2] De las ramas bajas, donde las aceitunas maduraban más tardíamente. Otros entienden este texto diversamente: “se recogen aquellas que llegan a la altura del tejado”. Otros “se las deja madurar en el tejado”.

[3] מגלגלו  o  מגרגרו La cuestión puede ser simplemente ortográfica, y las dos palabras realmente tener el mismo significado. es decir, recolectar los frutos solo tan pronto  :arenam artO .narudam omoc מגרגרו, elegir solo bayas; מגלגלו, permitir que las aceitunas permanezcan en el árbol hasta que estén   ,.fc( sarudam etnematelpmocביצה מגולגלת, un huevo bien asado) y, a continuación, recogerlos.

[4] Ex.27: 20

[5] Es decir, las aceitunas deben estar completamente maduras en el árbol antes de ser arrancadas.

[6] Rami ben Hama dijo: la mechas y aceite que hablaron los sabios, con ellas uno no puede iluminarse en el Shabat, uno no debe [tampoco] iluminar con ellas en el templo, porque fue dicho, para causar una lámpara se queme continuamente (Ex 27:21). – El lo dijo y lo interpretó: la llama debe ascender por sí misma y no a través de algo más (Leha’alot (quemar) significa literalmente causar que algo ascienda. -Estas mechas y aceites no se queman por sí mismos pero necesitan atención frecuente ). 

Shabat 21a. 

Como en hebreo la frase literalmente dice que había que hacer que la candela ascendiera, pero no dice que había que encenderla, ello implica que el kohén debía encender las candelas del Candelabro hasta que la flama se elevase por sí sola, sin que fuera necesario arreglarla para que ardiera mejor

[7] Shemot 29:42; Bemidbar 28:6.

[8] Vaiqrah 6:13.

[9] Shemot 25:30.

[10] El término tiene dos acepciones básicas: 1) «constante»; 2) «sin interrupción», y puede adoptar cualquiera de estas acepciones según el contexto en que aparezca (Lifshuíó shel Rashí}. En este caso se refiere a algo que es realizado sin interrupción, no importa cuánto sea el intervalo de tiempo entre cada acto. Con respecto a la candela, esta continuidad se refiere a encenderla cada noche, y lo mismo con respecto a la oblación de] Kohén Gadol [Sacerdote Mayor]. Con respecto al Pan de Semblantes [Léjem hapanim], se aplica el mismo principio, sólo que el intervalo de tiempo es más largo, de un Shabat al otro. En su acepción de «constante» se aplica al fuego de la pira del Altar, el cual ardía tanto de día como de noche (ver al respecto Vayikrá 6:6).

[11] En hebreo, la frase «Aharón y sus hijos la arreglarán de la noche a la mañana» podría entenderse como si Aharón y sus hijos debían ocuparse de arreglar las candelas toda la noche, Rashí precisa que ése no es su sentido, sino que la frase quiere decir que debían asegurarse de que las candelas mismas ardieran toda la noche 

[12] El de la quema de las luces

[13] Literalmente, ‘ desde arriba hacia abajo «. Ellos primero llenaron cada lámpara con una gran cantidad de aceite y encontrando en la mañana que la lámpara estaba todavía encendida y que aún había aceite en la lámpara, redujeron gradualmente la cantidad hasta que llegaron a un medio log. Esta medida se encontró suficiente para la noche más larga del invierno; en el verano se utilizó una mecha más gruesa para que el aceite se consumiera más rápidamente.

[14] Literalmente, ‘ desde abajo hacia arriba «. En primer lugar, llenaron la lámpara con una pequeña cantidad de aceite y encontrando en la mañana que había quemado, la noche siguiente aumentaron la cantidad de aceite y así sucesivamente hasta que llegaron al estándar de medio log.

[15] Y calcular mediante la mayor cantidad de aceite en primera instancia entraña residuos de aceite que están todavía en la lámpara por la mañana.